Estas tiendas jugueteras ubicadas en calles aledañas al centro de la metrópoli, han pasado de ser surtidoras de juguetes a mayoreo, a tan solo mostradores de productos, así lo narra don Jesús Ortega quien desde hace un año cerro su negocio.

“es triste ver como cada vez uno se hace más pobre, yo cerré mi tienda por que ya nadie compraba y mira que el juguete que se ofrecía es barato pero con tanto negocio nuevo que se está abriendo, los ya establecidos resentimos las ventas”

“ahora encuentras cosas chinas desde tres pesos lo que se hace más atractivo, y además los niños ya cambiaron antes en mis tiempos, uno era feliz con un carrito de madera o uno de plástico sencillito como los que vendía, pero ahora quieren celulares, robots y casi casi una casa”

De acuerdo a una serie de entrevistas que realizó Periodismo Social-Mediático a los propietarios de los negocios aun existentes, concuerdan en que los productos chinos cada vez golpean la economía mexicana con más fuerza.

“mira éramos casi toda la calle de tiendas jugueteras y ahora ya solo quedamos uno que otro salteado en la calle, si nos ha afectado porque antes vendías que tus 300 pesos o los 500 si te iba bien diario, pero hay días en los que se cierra sin haber vendido nada” opinó José comerciante de juguetes.

“huy esos chinos nos han dado en toda nuestra jefecita, porque imagínate nuestros juguetes de plástico los vendemos a mayoreo o menudeo, eso quiere decir que damos precios accesibles y luego vendemos hasta por docena, pero la gente ya no compra, y sabes es que con esas tiendas de todo a un precio, hasta juguetes similares a los de acá encuentras”.

“ la otra vez vi hasta trompos con luz al precio de tres pesos y yo vendo esos mismos trompos obvio de calidad a 15 pesos, la gente va a comprar el barato que ni dura, pero el mío tiene calidad y por eso ya no hay ventas, comentó don chucho comerciante desde hace mas de 5 años.

Para doña Carla las cosas no han sido tan malas.
“pues claro no hay ventas como antes que cerrabas y podías comprarte algo con lo ganado y hasta pagabas empleada ahora ya uno mismo tiene que hacerle de todo, pero es porque se han reducido las ventas, yo no ando tan quebrada voy saliendo al paso”

La producción de juguetes en el mercado chino se realiza gracias a las personas quienes con el interés de tener un mejor sueldo se someten a demasiadas horas de trabajo, y es que la mano de obra barata en china hace que cada vez se incremente más esta fabricación de juguetes.

Además de ser fracturadas las tiendas de comercialización de juguetes en nuestro estado, quienes también recienten las desventajas en ventas son los artesanos capitalinos.

Tal es el caso de Juan Carlos quien desde niño se dedica a la elaboración de juguetes artesanales como lo son: los clásicos baleros mexicanos, trompos, caballitos, guitarras, rines de luchas entre diversos productos que él elabora.

“antes me preocupaban las tiendas de juguetes de aquí sobre la 5 de mayo, pues eran de plástico y baratos, pero ahora los niños solo piden cosas con luces, que caminen, que hablen, y si antes me preocupaba ahora ya casi ni saco lo mínimo para comer”

“mira un camioncito de madera te lo vengo poniendo a los 50 pesos pero la gente cada vez regatea y ni modos tienes que bajarle hasta la mitad y a veces eso es lo único que vendo en el día”

“si yo creo que si nosotros ya solo les vendemos a la gente en ocasiones, como diciembre que se viene las piñatas y le ponen juguetes para los niños o en enero por los santos reyes, nuestros amigos artesanales han de andar peor pues ya a quien le llama la atención” dijo Raúl López comerciante de juguetera.

“antes eran los estados unidos quienes nos ponían en nuestra, me entiendes, y ahora son los chinos quienes nos dejan sin chamba y que hace uno sin estudios, ni modos de lo que sea, ahora el gobierno nos diera mejores oportunidades pero mira si hasta los de limpia andan en huelga para que les paguen” opinó don Jesús.

Ante esta situación los comerciantes de juguetes han decidido implementar nuevas estrategias de ventas, tales como al ofrecer dos productos al precio de uno, o quizás bajar el precio, pero lo cierto ante este mundo globalizado es que apenas se está resintiendo el futuro industrial.