Letras, ideas, ruidos, imágenes, y un éxtasis que se incrementa poco a poco por el deseo de escribir, son los elementos que en este momento han llenado mi mente, y es que al leer “Los Diez Mandamientos del escritor” de Sthephen Vinzinczey ha llamado mi atención el numero 3 “Soñarás y escribirás y soñarás y volverás a escribir.”
Sencillas letras al escucharse con un secreto guardado entre su composición, descifrable para solo aquellos deseosos por las letras y una pasión desbordante por escribir.
Afable es el Mandamiento, puesto que cada día diversas personas deseamos escribir por escribir, plasmar los pensamientos que nos ocupan y son varios quienes aseguran: “estás perdiendo el tiempo escribiendo”, “eso no sirve”, comentarios calificativos que pueden embaucar, destruir, desilusionar, a todo aquel que lo acepte.
Sin embargo, aquellos que soñamos con las letras precisas buscando el momento adecuado para plasmar historias, poemas, hechos, o un sinfín de palabras que en conjunto expresen una creación literaria.
Dejaremos de lado esos comentarios no acertados, dándoles el poder de expresarse y escucharles con sus ideas de lo que para ellos significa escribir, mientras que nosotros sabemos nuestro propio significado de dicha acción.
La palabra pasión es definida por la Real Academia Española como: Apetito o afición vehemente a algo, con esto entiendo porqué el significado de escribir en mí siempre lo defino con dicha palabra, realizando afirmaciones tales como “me apasiona escribir” “mi pasión es escribir” ” no tengo pasión alguna si no es por escribir”.
Al transcurrir los días solo busco el relato de mis pensamientos, por esa pasión que me llena, por el simple hecho de tomar lápiz y papel, de prender el ordenador y en un nuevo texto escribir un sinfín de ideas, releer y encontrar las deficiencias de mi escrito, ya decía un proverbio chino “Es mejor volverse atrás que perderse en el camino."
(Fotografía de imagenes de google.)
